domingo, 26 de mayo de 2024

VOCES entre VOCES

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LA PRIMERA VÍCTIMA DE LA GUERRA ES SIEMPRE LA VERDAD.

729 ES EL CÓDIGO COMERCIAL DE ISRAEL, TODOS LOS CÓDIGOS DE BARRAS DE LOS  PRODUCTOS QUE EXPORTAN EMPIEZAN POR ESE NÚMERO.

LA CAUSA ÚLTIMA DE LAS GUERRAS SIEMPRE ES EL DINERO, NO COMPRES PRODUCTOS DE ISAREL MIENTRAS SEA UN ESTADO GENOCIDA.

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EL ARTE DE VIVIR:

"MÁS ALLÁ DE LAS CREENCIAS"


Al principio teníamos todas las respuestas a las preguntas de la vida. Bueno, en realidad teníamos sólo una respuesta que servía para todo: "Es cosa de los dioses."

Pero, en realidad, era una respuesta que no nos decía nada útil.

El ser humano, que es un animal curioso por naturaleza, creó entonces la duda, la llave del conocimiento.

Era necesario empezar a pensar que tal vez las cosas no eran como parecían, que otra verdad era posible detrás de la verdad aparente aceptada por la mayoría.

Así, haciéndonos preguntas y buscando respuestas, nació la filosofía, la madre de todas las demás ciencias, el origen último de todo cuanto rige el comportamiento humano,

Todos creemos en algo, todos tenemos alguna ideología, la que sea, y alguna religión o idea ética, pero: ¿De qué estamos seguros?

Si lo pensamos detenidamente, casi de nada, sólo de haber nacido y de estar condenados a morir. A pesar de eso, seguimos pensando, dudando y aprendiendo hasta nuestro último día.

Lo único que diferencia a una persona razonable de un fanático es si tiene la capacidad y la valentía de poner en duda, en algún momento, sus propias ideas, abriendo así su mente a nuevos horizontes.

Esta exposición es, simplemente, una invitación a dudar, o sea, una invitación a pensar y crecer.

ARTES LIBRES

THE ART OF LIVING:

‘BEYOND BELIEFS’.

In the beginning we had all the answers to life's questions. Well, actually, we had only one answer that fit all: ‘It's up to the gods’.

But, in reality, it was an answer that didn't tell us anything useful.
The human being, who is a naturally curious animal, then created doubt, the key to knowledge.
It was necessary to begin to think that perhaps things were not as they seemed, that another truth was possible behind the apparent truth accepted by the majority.
Thus, by asking questions and searching for answers, philosophy was born, the mother of all other sciences, the ultimate origin of everything that governs human behaviour,

We all believe in something, we all have some ideology, whatever it is, and, some religion or ethical idea, but what are we sure of?
If we think about it carefully, almost nothing, only that we are born and doomed to die. In spite of that, we keep on thinking, doubting and learning until our last day.
The only thing that differentiates a reasonable person from a fanatic is whether he has the capacity and the courage to question, at some point, his own ideas, thus opening his mind to new horizons.

This exhibition is, quite simply, an invitation to doubt, that is, an invitation to think and grow.

ARTES LIBRES


5 poemas de Cada vez más tierra, de Teresa Garbí

LAURA DI VERSO

 

El nuevo poemario de Teresa Garbí, Cada vez más tierra, bebe de las mismas fuentes y profundiza en los mismos temas que el anterior: El aire encendido. La autora establece un vínculo con los padres muertos y lo hace desde ese espacio limítrofe que hay entre la vida y la muerte. Un espacio que sólo existe en la poesía.

En Zenda ofrecemos cinco poemas de Cada vez más tierra (Renacimiento), de Teresa Garbí.

***

[CUÁNTA TIERRA EN EL CANTO…]

Cuánta tierra en el canto de un pájaro:
bosques, selvas, cielos estrellados.
En un solo tono.

Mientras, se derrumba el mundo.

***

[SE HAN DETENIDO LOS DÍAS…]

Se han detenido los días.
Parada forzosa.
Se frenan las imágenes, se aplastan.

Debajo, la infancia, las pobres
horas que vivimos
y no nos salvan.

***

[TRES FLORES HAN BROTADO…]

Tres flores han brotado en una grieta
de mi casa.

Las riego: son mi jardín.

Tres flores perseveran para salvar
al mundo.

***

[TODO ESTÁ EN ORDEN…]

Todo está en orden:
Somos prisioneros
pero canta el ruiseñor
en el jardín
y corre el cervatillo
por la ciudad desierta.

***

[HAS VENIDO PARA VER LOS ÁRBOLES…]

Has venido para ver los árboles, la luz que se filtra
entre las hojas, el agua.

Has venido para escuchar el canto del grillo y de los
pájaros.

Eres testimonio de algo que brilla en la sombra y
nunca ha dicho nada.

—————————————

Autora: Teresa Garbí. Título: Cada vez más tierra. Editorial: Renacimiento. Venta: Todos tus libros.

BIO

Teresa Garbí nace en Zaragoza. Estudia Filología Románica en esa ciudad y cursa estudios de Bellas Artes, en Barcelona. Ha trabajado en el Colegio Universitario de Huesca; en Institutos de enseñanza Media de Lérida y de Valencia; en la Escuela Superior de Arte Dramático de Valencia y en la Biblioteca Valenciana. En 2013 funda Uno y Cero Ediciones. Entre sus obras de creación destacan: Grisalla, 1981; Espacios, 1983; Alas, 1987; Cinco, 1988; La sombra y el pozo, 1993; El pájaro solitario anida tras el muro, 1997; El bosque de serbal, 2001; Desde el silencio, nadie, 2007; Leonardo da Vinci: obstinado rigor, 2009. Ha publicado un ensayo: Mujer y literatura, 1997, y varios libros para aprendizaje de español y para lectura de enseñanza media (Una pequeña historia, 2000; La gata Leocadia y La gata Leocadia en la granja, 2002; El regreso, 2005), y dos ediciones de obras clásicas: El caballero de Olmedo, de Lope de Vega, 2004, y Romancero gitano, de García Lorca, 2011.



TEMAS TERTULIA 31-5-2024

AMOR Y HUMOR

DESTINO

MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS DE LOS PAPALAGUI.


TEXTOS TERTULIA 24-5-2024

GENTE INTERESANTE

UN SALTO AL INFINITO

MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS DE LOS PAPALAGUI.



GENTE INTERESANTE


Estábamos tomando un café con unos compañeros y alguien me dijo que yo le parecía una persona interesante, digna de conocer. Me han hecho falta varios años, una pandemia, algún que otro desencanto y mucho aprendizaje sobre la manipulación y el narcisismo para entender el entramado de esa expresión y lo despectiva que es en realidad.


La experiencia me ha llevado a la conclusión de que quienes andan buscando gente interesante se consideran por encima del resto y han establecido como nivel máximo de inteligencia el punto exacto al que su entendimiento es capaz de llegar; por encima de ahí, según ellos, solo están los genios. Es decir, clasifican intelectualmente a los seres humanos con su baremo particular.


Con esta premisa es natural que su vida sea un análisis permanente a la comparativa y un desprecio por aquello que ni entienden ni están interesados en entender, ya que sienten que su talento está a la máxima altura que puede llegar el de un ciudadano corriente y moliente. Una actitud insolente y absolutamente procaz. La relación con estos seres resulta tremendamente incómoda, pues van por la vida separando gente interesante de no interesante, cosificando al resto del mundo hasta convertirlo en mera nutrición intelectual, en información ambulante; nada les importa lo que los demás pensamos o sentimos, ni si ellos resultan tan interesantes como se creen.


No hace muchos días volví a escuchar la expresión, esta vez no iba dirigida a mí, más bien me la dijeron en tono de protesta por lo difícil que es encontrar personas nutrientes; no contesté, pero me paré a pensar, a observar y a observarme.


Es evidente que no con todo el mundo se coincide y que no estamos obligados a dar crédito a cualquier idea; existen personas con las que las conversaciones han de ser livianas y otras con las que a uno, sencillamente, no le apetece dialogar; tenemos días repletos de elocuencia y días en los que nada coherente sale de nuestros labios; a veces estamos confundidos y otras acertados… siempre con respecto a otro alguien; vivimos oscilando entre la certeza y la duda; podemos levantarnos amando el mundo o temiendo lo que el mundo nos pueda hacer, lo mismo que al acostarnos.


Pero todos somos seres humanos y, por ese simple y sencillo milagro, todos somos gente interesante, gente válida, gente que está en el lugar que le corresponde del puzzle, gente que ofrece lo que tiene, así sea ambigüedad, miedo, ternura, soledad o tristeza; porque de otro ser humano siempre se aprende, si no directamente de él, sí de uno mismo con respecto a él.


Ni somos los mejores, ni somos los peores, ni los más listos, ni los más tontos, somos nosotros mismos; lo único innegable es que no somos islas y, por la cuenta que nos trae, sería conveniente que tomáramos conciencia de ello cuanto antes, ya que gracias a los demás uno va averiguando quién es y logra entenderse un poquito más cada día y respetarse un poquito más cada noche.


25/mayo/2024 – Vicki Blanco para «VOCESentreVOCES»

GENTE INTERESANTE

¿Existe alguna que (no) lo sea?

¿La gente interesante lo es por interés?

¿Qué le interesa a la gente interesante?

¿Soy interesante si me gusta la gente, incluso la no interesante?

¿Se puede ser interesante si no te interesa la gente interesante?

¡Eh, gente! ¿Tiene esto algún interés?

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UN SALTO AL INFINITO

Tan sólo algunos pequeños cambios pacíficos podrían transformar completamente la vida humana en este planeta de un infierno en algo cercano al paraíso, un lugar donde todos los seres humanos podrían vivir materialmente como la clase media europea:


OBSOLESCENCIA PROGRAMADA. Prohibición de la obsolecencia programada. Tras la crisis de 1929 a alguien se le ocurrió que sería una buana idea fabricar todo de mala calidad para conseguir que hubiera que producir mucho más y activar así la economía, pero una vez superada esa crisis se continuó con esa nefasta costumbre que da lugar a millones de toneladas de desechos industriales cada año con la consiguiente contaminación, un problema que ya afecta ala misma supervivencia de la especie.


PARAISOS FISCALES. Prohibición de los paraísos fiscales. Mientras los gobiernos de todo color político nos exigen a los ciudadanos el ago puntual de nuestros impuestos permiten la existencia de paraísos fiscales donde se refugian tanto las enormes fortunas resultantes del narcotráfico y el crimen organizado como los beneficios de bancos y grandes corporaciones. Los gobiernos, mientras tanto, fingen no poder hacer nada a pesar del minúsculo peso politico y militar del grupo de países que forman el conjunto de los paraísos fiscales en el mundo. Todo un monumento a la hipocresía.


EDUCACIÓN. Es, sin duda, una de las claves principales para la evolución de las sociedades humanas. El sistema educativo occidental, el más extendido, se creó en Prusia, una región de la actual Alemania, a finales del siglo XVIII con la única finalidad de enseñar a leer y escribir a los hijos de los primeros obreros industriales y campesinos con el fin de que fueran trabajadores más eficientes una vez que llegaran ala edad adulta. Dicho sistema no buscaba el dearrollo humano o cultural del individuo, sólo su eficiencia laboral dentro de la más absoluta alienación. Por increible que parezca ese sistema apenas ha evolucionado y la razón es evidente: a ningún estado o gobierno, sea cual sea su ideología le interesa tener ciudadanos bien educados con un pensamiento crítico y/o artístico ya que serían mucho más difíciles de manipular. Algunos sistemas educativos llamados alternativos como Summerhill, Montesori, la Escuela Libre y similares han demostrado ser mucho mejores que el tradicional, pero apenas son aplicados, y cuando se hace es para brindar a los hijos de las élites una buena educación, perpetuando así la situación actual.


DEMOCRACIA DIRECTA. Incluso los países que consideramos democráticos funcionan todavía con un sistema sociopolítico creado tras la Revolución Francesa, cuando la mayoría de la población era analfabeta, un sistema que permite un mínimo de participación de los ciudadanos mediante la elección cada cuatro años de supuestos representantes sobre los que no se tiene ningún control una vez elegidos, el resultado es el caótico estado actual donde quienes gobiernan realmente son bancos y grandes corporaciones empresariales que crean con su codicia incontrolada crisis económicas y guerras que terminan pagando la población civil con susuimpuestos y/o sus vidas.

¿Sería posible un mundo tan injusto si los ciudadanos votáramos las principales leyes que nos gobiernan en una democracia más evolucionada?

¿Cuánto tardaríamos en prohibir por ley las guerras y los paraísos fiscales?

¿Votaría usted  regalar cientos de miles de millones de dinero público para salvar empresas y bancos privados mal administrados, los mismos que provocaron la crisis actual con su codicia y pésima gestión?

¿Por qué no decidimos los ciudadanos, mediante votación porcentual una vez al año, en qué se ha de gastar el dinero de nuestros impuestos?

¿No es posible hacer evolucionar la democracia hasta ese punto? 

Eso se decía, hace justo un siglo, sobre la capacidad de votar de las mujeres y hace dos siglos, sobre la capacidad de tomar decisiones sociales de quien no perteneciera a la aristocracia.

Hoy en día son cada vez más numerosos los grupos que plantean que es necesaria una reestructuración de la democracia para transformarla, mediante el voto electrónico a través de mecanismos informáticos, en sistemas de participación continua de los ciudadanos, en sistemas verdaderamente democráticos, que evitarían tanto leyes injustas como el estallido de conflictos que sólo benefician a ciertas corporaciones empresariales, en detrimento de los intereses de la mayoría de los ciudadanos.
 Lo denominan “democracia directa” o “democracia participativa”.


Estos cuatro cambios, en principio pacíficos, provocarían una enorme transformación en todos los aspectos de la vida humana y, tal y como está la situación actual en el mundo, tal vez sean la última oportunidad que tenemos de supervidencia y evolución.


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UN SALTO AL INFINITO

No estamos marcados con una cruz,
para que a nadie se le ocurra no andar en linea recta,
aunque nos queme en el estómago la onda expansiva del miedo.
Hace calor, abandonemos nuestros trabajos
y las tristes ropas por las calles.
Juguemos como niños en las fuentes.
Hace calor, quítate las medias
y robemos un banco.
Necesito hacer vida, algo interesante.
Subirme a la luna. Desafiarte.
V
oy a salir a la calle
para ponerme a dar besos hasta que me detengan.
Voy a tirarme a tu amor con mi traje de hombre araña.
Voy a darte un revolcón, a ver como nos sienta.
Voy a quemar todas las sábanas de nuestros fantasmas.
Nada es un pájaro sin sus alas.
Menos nosotros sin amor.
Si me oyes a deshora. Si te llego tarde,

será porque mi despertador es un pájaro loco.
Lo siento,
está visto que no sé rezar ni escribir nada serio.
Mientras la vida nos engorda.
Me tendré que fustigar, cada noche,
con un látigo de algodón dulce.
Ya me siento mejor,
he hecho con mis palabras un cóctel molotov.
Y he tirado nuestros corazones para que jueguen los gatos.

¿Qué nos quema la sonrisa,

si bailamos en el puto paraíso?

JJC – Juan Jiménez Caballero

UN SALTO AL INFINITO

EL UNIVERSO A ESCALA

Cuando a veces observas tu mano

y ves tan sólo una modesta huella,

y alzas luego la vista, y embriagas tus ojos

con lejanos cuásares, galaxias y estrellas.


Cuando observas que un simple gesto,

una palabra, una invitación, una mirada,

provocan un cataclismo inimaginable,

torna todo extraño, lúcido o cautivo

o hace brotar lágrimas, risas o, quizás,

la ira infantil de un gemido.


Creerás que tu minúscula mano

o ese tenue candor, sonrisa o rechazo

son eternos micro o macromundos,

y hasta te creerás minúsculo,

o un dios eterno y vagabundo,

o que necesitas aprender a mirar.


Pero cuando tu mente no deambule,

y aprenda a caminar sin miedos,

verás en el menor insecto algo puro,

un universo, perfecta arquitectura.


También en todo tu mundo cotidiano,

por el que tanto sufres y luchas, verás,

tan sólo un esquema imprescindible,

que contiene a todos los insectos,

todas las risas, toda vida, todo ser,


Pero nunca podrán esos universos,

tan minúsculos, enormes y eternos,

ofrecerte una oportunidad de ver algo,

que tu mente en blanco no se atreva a crear.

Nekovidal nekovidal@gmail.com 

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UN SALTO AL INFINITO

Un salto al Infinito con los ojos cerrados.

Esta es la vida, pues así nacemos, casi dormidos.

Luego volvemos a saltar hacia el otro infinito.

Esta es la muerte, compañera de vida.

Nos lleva con los ojos cerrados, inmóviles y helados.

Y repetimos pasando de un infinito al otro

hasta que nos volvemos más sabios.

Al fin y al cabo, todos los padres

quieren que sus hijos repitan

hasta que aprendan las lecciones.


La vida y la muerte son dos saltos en sentido contrario. La tradición india, que cree en la reencarnación, dice que tenemos que repetir las experiencias en este mundo hasta perfeccionarnos.

Alexandra Di Estefano Pironti. 

Un salto al infinito” Ediciones Carena.



UN SALTO AL INFINITO

Diálogo con mi Otro

-- El Lenguaje es el camino y la Poesía el atajo.

-- ¿ Te parece que es así ?

-- Seguro. Pero, ¡atención! en el atajo nos encontramos con lo inesperado del sendero. Todo pedrusco tosco.

-- ¡Furtivo risco! Te agrego que el poema-travesía requiere de un esfuerzo descomunal para poder levantar el velo del horizonte.

-- Velo... velo... rugoso acre. Nos obliga a revisitar todo de nuevo. Engendrar cordeles.

-- ¡ Reeducarnos ?

-- Si. Se espera siempre que la poesía desenvuelva aquello diferente que no está a la vista de lo que seduce la acción de los hombres.

-- ¿ De qué materia está hecha la seducción de los hombres ?

-- Se hace muy difícil percibirla. Seguramente, en una anómala época de improbidades, lo único que pueda salvarnos es abrir caminos con la poesía.

-- ¿ Volveremos a la senda de Homero ?

-- ¿¡... !?


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MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS DE LOS PAPALAGUI.

LA PROSA ONÍRICA DE MURAKAMI

Haruki Murakami es, a día de hoy, el escritor nipón que mayor popularidad ha logrado a nivel global. Sus novelas son un compendio de sentimientos límite donde la soledad y lo onírico logran atrapar al lector de manera irremediable.


Un creador, cuando lo es verdaderamente –cuando se aleja del simple recolector de imposturas–, no decide romper con la tradición artística en que, supuestamente, debería estar inserto. Haruki Murakami no decidió romper con la tradición literaria japonesa. Simplemente se dejó llevar, cuando se puso frente al teclado, por toda la literatura que previamente había degustado y disfrutado.

Nacido en 1949 en Kioto (Japón), Murakami es, en la actualidad, el autor nipón más popular fuera de sus fronteras. Y el estilo de su prosa dista mucho de lo que, tradicionalmente, venía marcando la literatura japonesa. Algo sin duda chocante, si tenemos en cuenta que tanto la madre como el padre de Murakami eran profesores de literatura japonesa. La cuestión es que, ignoramos si con el subconsciente propósito freudiano de «matar al padre», desde joven se zambulló en la lectura de autores occidentales, principalmente estadounidenses. Carver, Vonnegut o Scott Fitzgerald pasaron a formar parte, desde muy temprano, de sus literatos predilectos.

Las influencias occidentales en la literatura de Murakami son responsables, sin duda, de lo distante que se encuentra su obra de la de otros autores japoneses. Su obra está henchida de un surrealismo y una magistral manera de seducir la curiosidad del lector que poco aparecen en las páginas de sus compatriotas.

Su carrera hacia la abrumadora popularidad que atesora hoy en día comenzó en 1988, cuando publicó Tokio Blues (Norwegian Wood) que, sin embargo, es posiblemente su obra con menor carga surrealista. Se trata de un relato de iniciación, donde la canción de The Beatles ocupa el paréntesis del título como caja de Pandora de la que brota un torrente de emociones melancólicas. Apasionó a los lectores tanto dentro como fuera de su país natal.

Sus cuatro anteriores novelas habían sido desdeñadas por la crítica japonesa, que consideraba su estilo desconcertante, conversacional y excesivamente apegado a los valores culturales occidentales. El propio Premio Nobel Kenzaburo Oé calificó su talento como pop de peso liviano. A pesar de ello, Murakami recuperó su estilo anticonvencional en sus siguientes obras y alcanzó una fama que pocas veces ha conocido el mundo literario y que, dando la razón a Oé, sí puede considerarse pop.

Denostado en sus inicios por la crítica japonesa por alejarse de su tradición literaria, Murakami es hoy un escritor de popularidad global

La fama lograda con Tokio Blues permitió a Murakami viajar a Estados Unidos, donde viviría durante más de cinco años, antes de regresar a Japón y seguir cosechando éxitos. En 1995 publicó Crónica del pájaro que da cuerda al mundo, un nuevo éxito en su carrera. La búsqueda del gato de su esposa, por parte del protagonista, se convierte en un viaje entre mundos oníricos en que se confunden sueño y realidad para darle las claves de los problemas que rodean su vida real. Todo un vendaval de historias cruzadas que emparentan a Murakami con la corriente literaria del realismo mágico y lograron que muchos críticos comparasen su prosa con la de autores como Thomas Pynchon e incluso con la obra fílmica de David Lynch.

Uno de los intrigantes personajes que aparecen en Kafka en la orilla (2002) también emprende la alambicada y oscura búsqueda de un gato. De hecho, Nakata puede hablar con los gatos, y su historia se entrelaza con la del joven Kafka Tamura, que huye de su casa decidido a vivir en una biblioteca. Más realismo mágico llegado desde el corazón de Japón para entrelazar múltiples historias y arrasar en las listas de ventas de medio mundo.

Tal vez la excesiva popularidad de su obra haya tenido mucho que ver con su práctica ausencia de aparición en los medios. Murakami apenas concede entrevistas, y sus opiniones parecen quedar relegadas a la manera de expresarse que tienen los protagonistas de sus novelas. La soledad impregna cada una de sus páginas de una manera tan aparentemente fantástica como demoledoramente dolorosa. Sus protagonistas masculinos no tienen hermanos y tienen relaciones terribles con sus padres, mientras sus madres permanecen ausentes, los gatos parecen ser sus únicos compañeros, las mujeres quedan lejos de sus posibilidades y escuchan jazz de manera compulsiva para infligirse aún una mayor introspección. Todo un mundo de frustraciones que ha sabido llegar a los lectores a pesar de ser expuesto de manera alucinatoria.

Realismo mágico llegado desde el corazón de Japón para entrelazar múltiples historias y arrasar en las listas de ventas de medio mundo

A pesar de lo contradictorio que pueda aparentar el estilo del escritor japonés con los gustos mayoritarios de los lectores, con 1Q84 (2009) logró lo que solo antes había conseguido J. K. Rowling, la creadora de Harry PotterLas puertas de las librerías londinenses abrieron en la media noche para atender a los ansiosos fans de Murakami. Si tenemos en cuenta que, además, la novela tiene cerca de 1.600 páginas, podemos hacernos una idea del fenómeno que supone, quizá más cercano a la literatura juvenil que a la adulta. La narración, de nuevo, muestra a dos personajes solitarios y perdidos que se buscan, a pesar de existir en universos paralelos. El estilo de Murakami se afila y evita dar explicaciones, sólo deja que los acontecimientos, por muy extraños que puedan parecer, fluyan hasta impregnar al lector y atraparle de manera irremediable.

Rompiendo con su muy amada soledad, Murakami decidió abrir un consultorio online en 2015, para que sus lectores le hiciesen preguntas y le pidiesen consejos. Este tipo de contacto con los seguidores no deja de tener algo de surrealista. Tal vez por ello, el autor utilizó aquella experiencia –que duró poco más de tres meses– para enriquecer sus siguientes libros con nuevas realidades disruptivas.

Recién estrenada su nueva novela, La ciudad y sus muros inciertos (Tusquets), los titulares repiten hasta el hartazgo la proyección global del más occidental de los literatos nipones. Crítica y público coinciden en que ha merecido la pena esperar seis años para leer de nuevo a un autor que no decidió romper con la tradición, sino que, tal vez, se vio atropellado por todas las influencias que anidaban en su interior.

https://ethic.es/2024/05/la-prosa-onirica-de-murakami/?_gl=1*1wsnkc0*_up*MQ..*_ga*MTE2OTMwMDE0MC4xNzE2MjM5MzU4*_ga_0LL6WCT924*MTcxNjIzOTM1NS4xLjAuMTcxNjIzOTM1NS4wLjAuMTMxNDc1MzgwNw..


CUANDO MURAKAMI EXPLICÓ JAPÓN A TRAVÉS DE LOS ATENTADOS DEL METRO DE TOKIO DE 1995

Aunque Haruki Murakami ha triunfado con obras literarias de ficción, hace más de 25 años publicó un reportaje periodístico sobre los atentados con gas sarín en el metro de Tokio que sigue estando de actualidad.


6 de julio de 2018: Japón contiene el aliento. Shoko Asahara, fundador de la secta Aum Shinrikyo, y sus cómplices más destacados son ejecutados en la horca por diversos crímenes, el más espectacular de los cuales es el atentado con gas sarín perpetrado en el metro de Tokio el 20 de marzo de 1995. Murieron 13 personas y más de 6.300 tokiotas resultaron gravemente heridos. En 1997, el novelista Haruki Murakami, galardonado con el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2023, publicó Underground. La obra periodística relataba estos trágicos sucesos a través de su visión como japonés y también a través de los testimonios de algunos miembros de la secta criminal y de supervivientes del atentado.

Underground se abre con un mapa de las líneas de metro afectadas por el atentado. Esto ofrece al lector la posibilidad de situar geográficamente la historia que se desarrollará a lo largo de 500 páginas. El prefacio se detiene, mediante una nota a pie de página, en la historia del arma utilizada. El gas sarín fue desarrollado por los nazis en los años treinta y también fue utilizado por Irak durante el genocidio kurdo. Una gota de sarín del tamaño de la cabeza de un alfiler es suficiente para matar a una persona.

El autor no pretende idealizar el suceso, sino relatarlo de la forma más directa y realista posible

Al comenzar su libro de esta forma, Murakami establece algunos elementos narrativos escalofriantemente pragmáticos: el autor no pretende idealizar el suceso, sino relatarlo de la forma más directa y realista posible. La idea no es necesariamente hacer vivir al lector la pesadilla que sufrieron los tokiotas minuto a minuto, pero sí relatar el conjunto de los acontecimientos siendo lo más fiel posible a la realidad.

Murakami toma como punto de partida la carta de una lectora de la revista Ladies’ Home Journal que relata el despido de su marido incapacitado para trabajar tras el envenenamiento con sarín. Así el autor pone de relieve las carencias de la cultura laboral japonesa: «Como si no bastara con ser víctima de una violencia puramente arbitraria, este hombre había sufrido una ‘victimización secundaria’ (la insidiosa y penetrante violencia cotidiana dentro de la empresa). […] Por alguna razón, sus colegas habían estigmatizado a este joven empleado –»¡Eh! Ese es el tipo del ataque raro» – sin que él se encontrara nunca con esa imagen de sí mismo».

Tras realizar numerosas entrevistas de enero a diciembre de 1996, Murakami recopila una cantidad astronómica de textos que reelabora para evitar repeticiones, vacilaciones y digresiones. Organiza el conjunto para dar cuenta lo mejor posible de los acontecimientos, de su impacto en la sociedad japonesa, pero también de lo que revelan.

Rechazo a hablar

El autor fue en busca de material para Underground con el apoyo de dos ayudantes, Setsuo Oshikawa y Hidemi Takahashi. Y en ocasiones se encontraron con dificultades con la política de protección de testigos y víctimas.

En muchos casos, solo los tokiotas que figuraban en las listas oficiales de los hospitales publicadas en los medios de comunicación pudieron hablar con el equipo de Murakami. La presión social y el miedo ligado al «aura» del gurú también amordazaron ciertos testimonios. Esto reforzó la propensión de los ciudadanos y trabajadores de Tokio a mantenerse dentro de un determinado marco, a no armar jaleo y a minimizar la tragedia para no alterarlo todo, aunque ello supusiera hacer la vista gorda: «Tras la detención de los principales miembros de la secta Aum, la gente tenía menos miedo a las represalias, pero seguían negándose –»Mis síntomas no son realmente graves, no merece la pena hacer declaraciones»–, o, en más de un caso, los propios supervivientes estaban deseando hablar, pero sus familias se oponían […] También hay pocas entrevistas con mujeres, porque era más difícil localizarlas sólo por su nombre. Las muchachas solteras en Japón –y esto es pura conjetura por mi parte– no aprecian que unos desconocidos les hagan preguntas».

En su afán por evitar acabar con, como él dice, «una colección de voces sin cuerpo», Murakami se propuso interrogar a sus testigos sobre sus antecedentes, su escolarización, sus familias y, sobre todo, sus trabajos, para hacerlas más humanas, más profundas, más representativas de la diversidad de Tokio. Esto es lo que hace de Underground una historia impactante, contada desde la perspectiva de un ser humano, guiada por el deseo periodístico de captar la verdad del momento.

La imparcialidad de un relato importante

Murakami no se contenta con los relatos de los supervivientes; también le interesan la visión y las palabras de los discípulos de la Verdad Suprema de Aum. La secta sincretista, gobernada por Shoko Asahara, contaba con miles de miembros, a menudo de entre 20 y 30 años y en su mayoría licenciados. Entre ellos había expertos jurídicos o científicos, obviamente al servicio de los intereses de la secta a la hora de defender o atacar.

Aum también se regía por la tecnología (o la apariencia de dominio tecnológico), y Asahara utilizaba extraños cascos con electrodos destinados al «control mental», así como diversos vídeos que iban desde el clásico programa de propaganda hasta el anime en el que aparecía como un auténtico superhéroe.

Murakami no se contenta con los relatos de los supervivientes; también le interesan la visión y las palabras de los discípulos de la Verdad Suprema de Aum

Dar voz a quienes voluntaria o involuntariamente cayeron en las redes del gurú es de vital importancia no sólo para la imparcialidad de la narración. También lo es para captar la necesidad, a veces acuciante, de quienes, sintiéndose desubicados en una sociedad regida por el rendimiento, desean unirse a una corriente más espiritual a riesgo de ser manipulados por un individuo.

En UndergroundMurakami presenta a cada uno de sus interlocutores a través de un texto que destaca elementos clave de sus vidas y personalidades. Ya se trate de los supervivientes o de los miembros de Aum, el tipo de presentación sigue siendo el mismo, a veces correlacionando o contrastando ciertos rasgos del carácter de los individuos con el lugar que ocupan en la historia.

Aunque la segunda parte del libro, dedicada a las entrevistas con los miembros de la secta, es menos extensa que la primera, que se centra en los supervivientes y sus familiares, Murakami presenta ambos lados sin llegar a enfrentarlos.

Los conecta a través de sus intervenciones personales o del trazado de la novela. También extrae una conclusión humanista que apunta a los trastornos de una sociedad totalmente basada en la apariencia, la eficacia y la necesidad incesante de producción y renovación. Una sociedad que abandona al individuo y lo transforma en autómata. Por eso es fácil comprender que algunos siguieran ciegamente a un individuo que se presentaba como divino, movido por una extraordinaria sed de poder y que pretendía dar un golpe de Estado. Tras su detención, Shoko Asahara fue depuesto, pero Aum sigue existiendo bajo el nombre de Aleph.

Al incluirse a sí mismo en su propia historia, Haruki Murakami subraya que los sucesos del 20 de marzo de 1995 y sus repercusiones no solo conciernen a las víctimas y miembros de Aum Shinrikyo, sino también al conjunto de los ciudadanos japoneses.

Los periodos turbulentos de la historia no pueden analizarse a través del prisma simplista de una dicotomía bien/mal que el autor rechaza en el prefacio de su obra. Muchas cuestiones sociales siguen estando de actualidad, empezando por la gestión de la pena de muerte en Japón. Underground tiene ya más de 25 años, pero desgraciadamente sigue de actualidad por las cuestiones que plantea sobre el oscurantismo, la presión social y la seguridad interior.


Guillaume Labrude es docteur en études culturelles, en la Université de Lorraine. Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.



https://ethic.es/2023/05/cuando-murakami-explico-japon-a-traves-de-los-atentados-del-metro-de-tokio-de-1995/?_gl=1*1l2x7f3*_up*MQ..*_ga*MTE2OTMwMDE0MC4xNzE2MjM5MzU4*_ga_0LL6WCT924*MTcxNjIzOTM1NS4xLjEuMTcxNjIzOTM4MC4wLjAuMTMxNDc1MzgwNw..


 

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