VOCES
entre VOCES
TEMAS
TERTULIA 3-2-2017
¿LÓGICO?
DÍMELO
TÚ.
¿QUÉ
FUE DE LOS OVNIS?
Madurez
es el arte de vivir en paz con situaciones que no podemos cambiar o
tener el valor de cambiarlas cuando las circunstancias así lo
exigen. (Herbert Martin)
NO
ME INTERESA
No
me interesa saber a que te dedicas.
Quiero
saber qué es lo que añoras
y
si te atreves a soñar o alcanzar
lo
que tu corazón más ansía.
No
me interesa saber qué edad tienes.
Quiero
saber si te arriesgarás
a
parecer un loco por amor,
por
tus sueños, por la aventura de estar vivo.
No
me interesa saber que planetas están cuadrando tu luna.
Quiero
saber si has tocado el centro de tu propia pena,
si
has estado abierto a las traiciones de la vida
o
te has vuelto marchito y cerrado por miedo a más dolor.
Quiero
saber si te puedes sentar con dolor, tuyo o mío,
sin
moverte para esconderlo, diluirlo o arreglarlo.
Quiero
saber si puedes estar con alegría, tuya o mía,
y
si puedes danzar libremente y dejar que el éxtasis te llene hasta
las puntas de los dedos de tus manos y de los pies,
sin
advertirnos de ser cuidadosos, ser realistas o recordar las
limitaciones del ser humano.
No
me interesa si la historia que me estás contando es verdad, quiero
saber si puedes desilusionar a otros
por
ser sincero contigo mismo,
si
puedes resistir la acusación de traición y no traicionar a tu
propia alma.
Quiero
saber si puedes ser fiel y por lo tanto confiable.
Quiero
saber si puedes ver belleza hasta en los días feos,
y
si puedes nutrir tu vida desde su presencia.
Quiero
saber si puedes vivir con los fallos tuyos y míos
y
todavía pararte en la orilla del lago y gritar a la luna llena
plateada: ¡Sí!
No
me interesa saber dónde vives, ni cuánto dinero tienes.
Quiero
saber si te puedes parar después de una noche de pena y
desesperación, débil y dolido hasta los huesos,
y
hacer lo que hace falta para los niños.
No
me interesa saber quien eres, ni porqué estás aquí.
Quiero
saber si puedes estar en el centro del fuego conmigo sin encogerte.
No
me interesa dónde, qué, o con quién has estudiado,
Quiero
saber si te sostienes desde dentro
cuando
todo a tu alrededor se cae.
Quiero
saber si puedes estar solo contigo y si verdaderamente disfrutas de
la compañía
que
mantienes en tus momentos de soledad …”
Khalil
Gibran
Hay tres cosas que nunca vuelven atrás: La flecha lanzada, la palabra pronunciada y la oportunidad perdida.(Proverbio chino)
TEXTOS
TERTULIA 27-1-2017
EL
GRITO.
SIN
ANESTESIA.
EL
NOMBRE DEL PATO.
EL
GRITO.
Uno
nunca sabe cuándo le va a salir el aullido liberador del alma, el
obligatorio grito salvador.
Uno
pasa la vida callando lo que ve a su alrededor, obviando palabras y
acciones para no dañar y no dañarse, mirando para otro lado cuando
observa etiquetas excesivas, prácticas carentes de base y
presunciones varias; también soporta burlas detractoras y aunque uno
es consciente de que provienen del tándem complejos/ignorancia no
por ello dejan de molestarle y de hacerle la vida menos agradable, ya
que siente analizado cada uno de sus movimientos y de sus gestos,
consciente de que al mínimo fallo habrá un coro –no precisamente
de ángeles– que pregonará el desliz hasta convertirlo primero en
falla, después en menoscabo y finalmente en lacra social.
¡Qué
perturbador y qué grotesco!
En
un intento de justificar el motivo de su prostitución afectiva y las
razones de su afable masoquismo uno entabla un diálogo mental
consigo mismo, pero pasan los días, los meses, los años y uno
sigue sin entender y sin entenderse, rechazando y aceptando,
queriendo y odiando, protegiendo y atacando, dejando sus derechos de
lado, adentrándose en sus obligaciones, asumiendo que la vida ha de
ser como dios manda, es decir, como la dictan quienes han tomado el
mando de la vida de uno que, de pronto, revienta en gritos de cólera
pidiendo que le dejen respirar sin asistencia, caminar sin
orientación ajena y ser quien es y, uno, con esa actitud desafiante
y vehemente, no consigue sino otorgar mayor autoridad a la mirada
analítica del orfeón de demonios que esperaba agazapado el
estallido visceral para convertirle a uno, ahora con más razón que
nunca, en desecho.
Hasta
que una tarde (siempre aparece el momento adecuado) uno recibe el
aire en el rostro, la mente se le despeja y uno ve con claridad
meridiana que esos dioses son sólo hombres y mujeres más
contradictorios que uno mismo y tan depravadamente simples que lo
único que saben hacer es lamerse las heridas porque les asusta el
escozor de la cura; entonces uno se yergue y sabe que su grito no es
para los demás, no hay nada que arreglar fuera, lo que uno precisa
es un grito interior, contenido y poderoso, que le transporte a su
lugar en la ceremonia de la vida y le ayude a finiquitar, de una vez
por todas, la absurda gentileza de la sumisión.
Victoria
Blanco
Madrid,
23 enero 2017
EL
GRITO
Grito
y grito
que
no hay más razón
que
ser amado
y
amar al ser querido.
a
la vida grito porque vivo
al
amor porque amo
Grito
por montañas y valles
grito
y grito desencajado
grito
en los rascacielos y calles
grito
en bares y mercados
a
todos grito
que
el odio no es en vano
que
el amor no es un rito
grito
que me des la mano
desolado
grito
por
un poquito de amor suspiro
para
los pobres sin corazón
para
los culpables de un delito
grito
por amor
a
los que han perdido la razón
a
los que el dinero hacen su mito
a
los que el poder su destino
a
su corazón grito
por
amor grito desesperado
grito
y grito
que
no hay mas razón
que
ser amado
y
amar al ser querido.
Grito
para
que se levanten los enfermos
pido
para los que lloran consuelo
para
los olvidados un recuerdo
pido
un ratito de felicidad
para
los niños huérfanos
para
los niños abandonados
para
los maltratados
para
las mujeres que sufren
para
los viejos olvidados
grito
que lo más bonito
es
amar y ser amado
grito
y nadie me escucha.
Diego
Francisco Guevara de Bonis
EL
GRITO.
Ya
no grito, salvo para llamar un taxi y poco más, pero he gritado, y
mucho, en mi juventud, contra tantas cosas que la lista se haría
casi interminable.
Aunque
costó, finalmente aprendí que quien grita es porque no está seguro
de lo que dice, porque tiene algún tipo de miedo o herida, o porque
tiene algún problema de audición.
Cuando
se expresan palabras sanas, casi siempre, un susurro es suficiente.
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EL
GRITO.
¿Cómo
te atreves a insultarme
con
palabras bonitas
y
a palpar mis latidos?
Voy
a tener que partirte
la
cara a besos.
José
María Rico
SIN
ANESTESIA.
-El
Héroe razonable
(Letra
y música.- Babelain)
El
Héroe razonable /se ríe de los ciclones
Baila
con las estatuas /salta entre los balcones
En
un lecho de porcelana /el fuego helado del amante
Derrite
todas las lágrimas /ya nadie ama como antes
Grita
la sangre del viento/y resquebraja los labios
De
las tardes de los bosques/donde se cobijan los sabios
---
Los
jardineros sin rostro/riegan con miel de azahar
Las
bocas de las langostas/que han desertado del mar
Cerezas
de carne y hueso/reflejan en los espejos
La
sonrisa de las flores/que lloran porque están lejos
La
lluvia dibuja sombras/sobre las piedras dormidas
Y
borra viejas historias/antes de su partida
Ya
se aleja la tormenta/aúllan los peces del lago
Las
estrellas nos arropan/no sufrimos grandes estragos
En
un rincón del verano/hay una veleta oscura
Señalando
hacia la noche/sin pasar por la locura
El
Héroe razonable/esconde el puño en el bolsillo
Sonríe
al rayo de luna/entre el canto de los grillos
José
Luis Álvarez
SIN
ANESTESIA.
Los
dioses no juegan a los dados, claro que no . . .
Los
dioses juegan siempre a la ruleta rusa, tienen muy claro que vida y
muerte nada son la una sin la otra, como tienen claro que los
humanos, sólo mediante la locura, se atreven a jugar seriamente,
obviando su patética cotidianeidad, soñando como niños que ya
nunca volverán a ser, o intentando en sus juegos imitarles a ellos,
a los dioses.
Pero
hay algunos mortales, sólo algunos, que ya no tienen ninguna
posibilidad de huir de la demencia de su mortalidad, son los más
peligrosos para sus semejantes, los que no pueden ya ni sospechar su
lugar en el universo, los que nada comprenden e intentan destruir
cuanto no comprenden, los que nunca se apasionan, los que olvidaron
jugar . . .
Por
ellos los dioses ya se cansaron de sentir lástima . . .
Los
dioses no juegan a los dados, claro que no . . .
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EL
NOMBRE DEL PATO
De
chico me encantaba, soñaba con los sábados por la mañana temprano
poner la TV ver Los Chiripitiflauticos con Locomotor, uno que había
de arqueología, Félix Rodríguez de la Fuente, Furia, Flipper...
los de mi generación los recordareis.
Antes,
porque madrugaba mucho, tenía que esperar leyendo comics, Tebeos, o
revistas infantiles, mi favorito era El Pato Donald un pato ilógico,
buscavidas a veces un poco cruel y para nada reflexivo.
Viendo
el panorama actual cada día me acuerdo más de ese pato, me lo
recuerda otro pato que se ha hecho muy famoso por acciones ilógicas
e irreflexivas, así, sin anestesia, algunas de sus acciones otros
completamente opuestos a él las contemplaban como suyas, véase
cepillarse los tratados de libre comercio, otros en la misma onda
pero más exagerados también las abrazan como el proteccionismo
nacionalista. Todo eso me da igual, ya se enterara de lo que vale un
peine, y mientras probaremos todas esas medidas populistas, lo que no
me da igual es el cierre de fronteras a los más desfavorecidos, pero
yo no quiero denunciar ni polemizar hoy de todo eso.
El
Sr. Donald Trump, que parece salido de los comics de Disney pero más
feo y con infinito poder, se dice ecologista, sí, por los cojones,
no me voy a extender por los oleoductos que ha retomado ni por sus
declaraciones del tratado de Paris, ni sobre la ratificación de éste
en Marrakech, sólo quiero lanzarle un mensaje a usted Sr. Pato
Donald Trump y a los que le apoyan o han votado: En el Nombre del
Pato, vuélvase a los comics de donde nunca tendría que haber
salido.
Diego
Francisco Guevara de Bonis
EL
NOMBRE DEL PATO.
Alguien
me invitó hace un tiempo, y nunca diré quien fué salvo que lo diga
antes esa persona, a poner nombre a una parvada de patos, uno por
uno, desde un puente sobre el río Genil. Los patos, tan patosos
ellos, ni se enteraron. Mientras, yo sigo dudando si aceptar o no tan
surrealista invitación . . .
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