VOCES entre VOCES

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TEMAS TERTULIA 13-11-2020

AMIGOS

ESA COSA DE LA QUE USTED ME HABLA

MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.

La creatividad requiere que la valentía se desprenda de las certezas. (Erich Fromm)

HABANA TÚ

Y hoy está crecido el mar
no es que la marea suba por un hecho natural
es que llora Yemayá
Juan Formell


De niña, entre las grietas de la tierra
buscaba en ti mi aurora
a semejanza mía, a semejanza tuya
cuerpo oscuro y esbelto de mi sueño.
Puras ante la espera las imágenes
emisarias de la tarde que caía
pegada a su horizonte.
Tenías en secreto tu espigón de metales
inclinada en tu borde busco el ancla perdida
te busco en el regreso, estás llena de pájaros
vuelve a secar tus manos y cuéntamelo todo.
Era esto el abandono y lo sabías.
Óyeme estos lamentos que me salen ardiendo
yo sólo te deseo,
la sombra de aquel tiempo en ti misma entrevista
con inútil ternura
y tú me dabas fuerza
rendida y dócil como el mar sabe serlo.
Aquel concilio que tantos han cantado
sin una urgencia propia como ésta de este instante.
Tampoco fue tu culpa si no les comprendiste la amargura
faltándoles la leche y el abrigo
te lo dieron todo, vida que no pedías.

Elena Tamargo

Fuente: https://www.poemas-del-alma.com/

Si hacemos el bien por interés, seremos astutos, pero nunca buenos. (Cicerón)

TEXTOS TERTULIA 6-11-2020

NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

A POR CHOCOLATE

MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.

NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

Arrastran sus complejos y hacen al resto del mundo cargar el peso de sus arrogancias y miserias. Disfrutan de privilegios que se autoconceden y de salarios que ellos mismos marcan año tras año con impunidad, en eso todos se ponen de acuerdo. Representan una obra teatral tan absurda como macabra en la que deciden el destino de millones de vidas.

Los llamamos políticos.

Se refugian en los miedos ajenos para extorsionar las mentes. Arrogantes y engreídos se autoproclaman representantes de dioses cuyos supuestos preceptos ni siguen ni respetan. Les gusta ser adorados y venerados. Los peores destruyen docenas de vidas en su enfermizo camino, pederastas y violadores para los que ni el infierno que pregonan sería suficiente castigo. Adoran y acumulan riquezas mientras exaltan hipócritamente la pobreza.

Los llamamos sacerdotes.

Mediante sus órdenes o un simple click de ordenador especulan con cuanto se pone en su camino. No crean ni empleo ni riqueza, sólo mueven dinero ajeno para conseguir beneficios propios. Deciden guerras o hambrunas, vida o muerte que se ha de repartir entre millones de personas. No tienen escrúpulos ni conciencia y son, en su psicopatía, los verdaderos amos del mundo, del que llevan siglos escribiendo su historia.

Los llamamos banqueros.

Algunos son artistas, otros se desenvuelven en los más variados oficios, de todas las edades y estatus económicos. Llevan o arrastran dolores inimaginables como una depresión o el éxtasis de la creación artísticas. Ríen, aman y lloran como cualquiera pero ellos, en su pequeño, único y propio infierno, viven y dejan vivir.

Los llamamos locos.

¿Por qué a unos sí y a otros no?

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NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

Y aquí estamos.

No nos une nada, nos separa todo, tus miedos, tus fantasmas y tus egos.

Mi hastío, la monotonía, mi indecisión.

No nos une nada, nos separa todo y, sin embargo, aquí estamos desgastándonos, amándonos de vez en cuando, aborreciéndonos cada vez más.

No nos une nada, nos separa todo, tu vida, la mía, lo que dejamos atrás . . .

Maggie Daniel

NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

¿Cómo te atreves a insultarme

con palabras bonitas

y a palpar mis latidos?

Voy a tener que partirte

la cara a besos.

José María Rico - Spencer

NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

Vamos a quedar

y nos comemos a besos las palabras.

Sí, para alimentarnos yo pondré el corazón

y tú la salsa.

Vamos a pecar,

de nada tienen culpa nuestros cuerpos.

Amada desconocida, en esta cita a ciegas

me reconocerás

por el vestido de lunares y mi nariz de payaso.

JJC – Juan Jiménez Caballero

NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

Si tuviéramos que presentar ante una civilización extraterrestre a un sólo ser humano como canon de nuestra especie, un ser que reuniera todas nuestras características esenciales al tiempo que resumiera lo que ha sido nuestra existencia hasta hoy en este planeta, no tendríamos más remedio que exhibir a un demente.

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NO TODOS LOS LOCOS DICEN VERDADES

AUDIO:

DEL AMOR Y DEL OLVIDO-

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Rafael Cotilla

A POR CHOCOLATE

En casa de mis padres, mejor dicho, en casa de mis abuelos maternos que es donde vivíamos, cuando alguien no se enteraba de una conversación mi abuelo decía: ¡a por chocolate! y todos nos reíamos, incluso el que estaba despistado; me hacía mucha gracia cuando era niña, no solo porque me sabía la historia sino por el tono hilarante que empleaba al decirlo.

Contaba mi abuelo que, allá por los años 30, dos amigos coincidieron por la calle de Alcalá, caminaban en sentidos opuestos y por aceras diferentes, el tráfico entonces no era mucho, pero sí suficiente para dificultar una conversación entre dos personas a las que separaba una ancha calzada.

–¿Qué tal estás? – preguntó uno.

–A por chocolate – respondió el otro.

–Que si ya estás bien del resfriado – insistió el primero.

–Para mi madre que espera visita esta tarde – fue la respuesta.

Así se zanjó la conversación y, alzando un brazo en señal de despedida, cada uno continuó su camino.

Si prestamos atención a cualquier conversación que nos sea más o menos ajena -lo digo por eso de tener objetividad sobre el asunto- veremos que no se diferencia mucho de la historia de la calle de Alcalá que contaba mi abuelo, y no es necesario que haya asfalto de por medio, ni ruido de motores, ni absolutamente nada más que el desinterés habitual que tenemos por los demás. Lo que pasa en realidad es que no nos gusta conversar, ni escuchar al otro, sencillamente estamos a la espera de que llegue nuestro turno para soltar lo que hemos ido a decir. Al más puro estilo Paco Umbral, solo nos mueve la intención de hablar de nuestro libro, de nuestra vida, y nos importa un carajo lo que el otro necesite o quiera decir.

Pero, saber escuchar es algo más que tener la capacidad de oír a los otros, es también poseer la de oír nuestras propias palabras. Sería excepcionalmente maravilloso que tuviéramos una especie de grabadora en nuestro cerebro que nos permitiera escuchar al llegar a casa todo lo que hemos dicho; tengo la certeza de que nos arrepentiríamos de muchas de las sandeces vomitadas.

La parte de escucharme la tengo difícil porque soy bastante visceral y no mido bien lo que sale de mi boca, pero la de escuchar al otro me resulta más amable, de hecho, trato de ponerla en práctica con la mayor frecuencia posible y es asombroso lo poco acostumbrados que estamos a que nos escuchen. Ha ocurrido, por ejemplo, que ante mi silenciosa escucha durante una conversación telefónica me han dicho desde el otro lado de la línea: ¿Sigues ahí? No negaré que la pregunta me resultó algo embarazosa, de hecho, opté por robar un minuto a la charla y explicar mi mutismo; pero sin lugar a dudas prefiero que mi muda atención provoque una incómoda interrogante antes de que, por una posible respuesta incoherente, mi interlocutor pueda pensar: ¡A por chocolate!

07/noviembre/2020 – Victoria Blanco para «VOCESentreVOCES»

MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.

*Nunca fue una mentira tan fuerte como para resistir ni el paso del tiempo, ni el peso de una pregunta adecuada.

 

*No hay prejuicios ni cadenas más difíciles de romper que aquellas cuyo portador no siente ni sospecha como tales.

 

*Tanto ha condicionado el azar a la historia humana, que ésta no es más que la Historia del Azar.

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