domingo, 27 de enero de 2019


VOCES entre VOCES



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"Si se prohíbe la industria de la droga, industria asesina, ¿por qué no se prohíbe la industria de armamentos, que es la más asesina de todas?"(Eduardo Galeano)





TEMAS TERTULIA 1-2-2019

LUCIÉRNAGAS.
TENEMOS QUE APRENDER.
MICRORRELATOS Y AFORISMOS




  • Ni en las cabezas que apaga la afilada sombra de los estandartes
  • ni en los pechos abiertos abandonados en los rastrojos
    ni en las manos que sujetan el frío cetro
    ni en el corazón de la campana
    ni bajo los pies de la catedral
    se contiene todo

    ésos que llevan los carros por un suburbio mal adoquinado
    y los que huyen de un incendio con una botella de 
    barszcz
    los que vuelven a unas ruinas y no para llamar a los muertos
    sino para encontrar el tubo de una estufa de hierro
    los que sufren hambre son los que aman la vida
    los golpeados en el rostro son los que aman la vida
    es difícil llamarlos flor
    pero son un cuerpo
    o sea plasma vivo
    dos manos para cubrirse la cabeza
    dos piernas rápidas en la huida
    la capacidad de conseguir el alimento
    la capacidad de respirar
    la capacidad de transmitir la vida bajo el muro de una cárcel
    mueren esos
    que aman más las bellas palabras que los olores grasientos
    pero por suerte éstos son muy pocos

    la nación persiste
    y volviendo con los sacos llenos de itinerarios de la huida
    levanta un arco de triunfo
    para los bellos muertos.

    Zbigniew Herbert, incluido en Poesía polaca contemporánea (Ediciones Rialp, Madrid, 1994, selec. y trad. de Fernando Presa González).
    Otros poemas de Zbigniew Herbert
    El abismo del Señor CogitoEl de ciencias naturales

    "Con el fin de estar abierto a la creatividad, uno debe tener la capacidad para el uso constructivo de la soledad. Hay que superar el miedo a estar solo". (Rollo May)


TEXTOS TERTULIA 25-1-2019

PIRÓMANOS DE SUEÑOS
DÍGAME USTED . . .
MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.




PIRÓMANOS DE SUEÑOS

Están ahí, generalmente vestidos con trajes a medida, bien perfumados, con un coche y un chófer esperándoles en la puerta, cuesta imaginar un interior sin alma envuelto en tanta elegancia.

Están ahí, disfrazados de políticos, banqueros, economistas o periodistas al servicio del mejor postor.

Están ahí, para un buen psicólogo serían dignos de lástima, conociendo sus carencias, sus dolencias, su falta de empatía, su psicopatía.

Están ahí, crean guerras, provocan crisis económicas que arruinan países enteros, crean hambre en miles de personas especulando con alimentos, siembran la muerte y el dolor con cada decisión, cada inversión, cada orden que dan.

Están ahí, débiles, tementamente débiles, hacen del uso de sus semejantes como meros objetos el triste consuelo de su mediocre existencia.
Intentan construir un mundo de seres tristes, egoístas, ignorantes, mezquinos y así fácilmente manipulables, un mundo a su medida.

Están ahí, son pobres de espíritu, agresivos, mediocres, llenos de la arrogancia que da la ignorancia y el dinero fácil, carentes de toda empatía, en realidad, son los seres más débiles de nuestra especie.
Son los pirómanos de sueños, y aquí surje el dilema: si tratarles como enemigos o como personas que necesitan ayuda.

Están ahí . . .

No es justo decir que sean malos, sólo están enfermos, pero su maldita enfermedad destruye vida a cada paso transformándose entonces en problemas de todos, en tragedias colectivas.

En cualquier caso, no ya sólo por la supervivencia de nuestra especie, sino de la vida misma en el planeta, algo tendremos que hacer.

Sabemos por experiencia que cambiar el poder de manos, según ideologías, filosofías o religiones que nos guien, no soluciona nada o muy poco, sólo nos queda, pues, redistribuir ese poder entre todos los ciudadanos.
Votemos libremente todos, pero no una vez cada cuatro o cinco años a personas que no conocemos ni, mucho menos, sus intenciones reales.
Votemos todos, una vez al año, en que utilizar esa enorme cantidad de riqueza que es el dinero público, votemos todos si declarar o no una guerra, porque nosotros, y no quienes las provocan y se lucran con ellas pondremos, llegado el caso, los muertos.
Con ese simple cambio constitucional cambiaría completamente nuestra sociedad, muestro entorno cotidiano, nuestra calidad de vida, nuestro bienestar.

Es fácil de imaginar que votaría la mayoría de los ciudadanos: una muy buena sanidad, porque ningún ciudadano, al margen de su ideología, votaría recortar algo tan indispensable, se elegiría un nuevo sistema de enseñanza acorde con estos tiempos, no el obsoleto de hace dos siglos y medio, aún vigente, un sistema donde los niños vayan a la escuela felices, se destinaría una buena suma de dinero para investigación, algo muy rentable a medio y largo plazo, se votarían jubilaciones dignas, nadie merece un buen retiro más que quien ha trabajado honradamente toda su vida, buenos transportes y autopistas, gratuitos todos, porque ya los hemos pagado con nuestro dinero, etc. Se votaría, sin duda, que el sueldo de ningún político superara el de un médico o un maestro, terminando así con ese privilegio irracional según el cual los políticos son el único gremio que elige su propio sueldo.

Pero hay una parte de la sociedad, una minoría muy reducida, que se opondrá a este tipo de democracia, es lógico, irían al paro casi todos, o se limitarían a hacer un trabajo de funcionarios.
Habría todavía otra minoría que se pondría aún más nerviosa: las grandes fortunas, banqueros y corporaciones, los verdaderos jefes de casi todos los políticos, esa minoría que gobierna realmente y decide nuestro presente y futuro, sin ninguna legitimidad en una democracia.

No nos perdamos en sus juegos, mentiras y manipulaciones, da igual de que color se disfracen, hagamos evolucionar una vez más a la democracia como ya ha hecho varias veces a lo largo de su historia, nuestra historia.
No dejemos que los pirómanos de sueños quemen más sueños e ilusiones de evolución y progreso, no valdrá la pena ni para nosotros ni para ellos, todos viviremos mejor cuanto más directa, real y participativa sea la democracia en que vivamos, incluso ellos.
Ellos no lo saben, ni lo pueden imaginar siquiera, pero nosotros, la mayoría de los ciudadanos, sí.

Nekovidal - nekovidal@gmail.com ARTES LIBRES www.arteslibres.net


PIRÓMANOS DE SUEÑOS

Detectan con formidable habilidad el momento en que nuestra vida entra en el duerme vela, ese breve instante en el que corazón y cabeza caminan al unísono, para prender la mecha de la incertidumbre; da igual que la ilusión abrazada corresponda a la trayectoria laboral o a la necesidad recreativa, ellos saben edificar a la perfección la pira del desencanto; siempre tienen a punto la frase exacta que nos intranquiliza acompañada, en la mayoría de los casos, por el factor sorpresa aunque en ocasiones ni siquiera utilizan la palabra, se sirven de una mirada, de un gesto de desprecio o de una oportuna interjección para hacer saltar la chispa y provocar la combustión que nos facturará de inmediato a su realidad, después será nuestro fuego interno el encargado de convertir en cenizas los castillos que levantamos con el alma y que, tal vez, no eran de naipes; sus manos siempre quedan, aparentemente, limpias.
Virginia Woolf decía que quien nos roba los sueños nos roba la vida; yo digo que quien nos los quema con la misma arrogancia que Nerón quemó Roma, no sólo nos roba la vida, también deja en barbecho el campo de nuestras quimeras que vigilará atento desde su indigna altura para, una y otra vez, atizar los rescoldos y alimentar su pútrido ego.
No me cabe duda de que estos incendiarios tendrán sus motivos, puede ser que vivan en la auto decepción permanente, que no tengan otra referencia que el odio o que jamás hayan sido amados, cualquiera de estas opciones o de otros cientos posibles haría comprensible su actitud, pero jamás la justificaría; aun así, es la crueldad manifiesta de la que suelen hacer gala la que invalida, a mi entender, su esencia humana. Por su bien espero que en el tramo final de su camino, el que antecede al encuentro con el Ángel de la Muerte, cuenten con un secretario tan fiel como fue el del hijo de Agripina, de otro modo sus monstruos les atormentarán con fiereza porque cuando caigan en el duermevela de su propia agonía de nada les servirá su pericia sobre el manejo de los sueños.

25/01/2019 – Victoria Blanco para “VOCESentreVOCES”


PIRÓMANOS DE SUEÑOS

No te engañes con los cantos del reloj de cuco.
No amontones días vacíos de papeles amarillentos.
Devora los segundos.
Enloqueceríamos si alguien nos dijera,
al oído, el tiempo feliz que nos queda.
Tenemos miedo a morir porque no vivimos del todo.
Métele fuego a la vida y verás como arde.

Quisiera estar drogado con un pico de libertad.
Ya ni siquiera soñamos,
nos han dicho que son muy caros nuestros sueños.
No te preocupes, todo lo cura el tiempo,
menos los tiros por la espalda del reloj.

Pero estamos aquí, para soñar de nuevo.
Acuérdate, estamos aquí para ser posibles,
si se te quedó chico, juégate de nuevo el pellejo.
¿Cuándo se nos olvidó que somos un milagro irrepetible?
Te lo juro por Dios, estamos aquí para no rendirle cuentas a nadie.
Roba la felicidad y corre.

¿Te digo un secreto? No hay cárceles para todos.

J.J.C. - Juan Jiménez Caballero



PIRÓMANOS DE SUEÑOS

La ninfa del bosque sembraba sueños. Los pirómanos del bosque  pretendían quemar sus sueños, pero el dragón de fuego lo impidió.

M.C.G.C.


DÍGAME USTED . . .

PERVIVE EL ALMA
Audio:


Rafael Cotilla




DÍGAME USTED . . .

Dígame usted, ¿qué ilusión tiene cada mañana al despertar?, ¿tiene tiempo de perder o ganar diez minutos en pensar sobre eso cada día?


Dígame usted, ¿hay algo más valioso que pueda comprar que tiempo libre?


Dígame usted, ¿se acuerda como veía el mundo cuando era niño, luego joven, luego menos joven?


Dígame usted, ¿qué forma, olor, color y sabor tiene su paraíso?


Dígame usted, ¿es posible un verdadero paraíso no compartido?


Dígame usted, ¿qué es lo más valioso en su vida ahora mismo?


Dígame usted, ¿qué le hace reir y qué le hace sonreír?


Dígame usted, estando completamente rodeados de manipulación, mentiras y noticias falsas, ¿quién puede distinguir en justicia qué es verdad y qué mentira?


Dígame usted, ¿ha tenido noticia de alguien más sabio que aquel ateniense que dudaba de todo?


Dígame usted, ¿cómo nos atrevemos a matar a nuestros semejantes porque no comparten dioses, todos verdaderos, creados por nuestra imaginación?, ¿imagina usted una mayor expresión de demencia?


Dígame usted, ¿cree que decide cada acto, decisión o idea que, aparentemente, decide?


Dígame usted, ¿no le parece que es poco inteligente temer a lo inevitable?, ¿por qué teme, entonces, a la muerte?


Dígame usted, ¿sabemos algo salvo que creemos que sabemos algo?


Dígame usted, ¿ha encontrado algo más perseverante que la esperanza?


Dígame usted, ¿conoce un olor más hermoso que el de la paz?


Dígame usted, ¿ha encontrado en la vida de este planeta energía más poderosa que, en cualquiera de sus formas, el amor?


Dígame usted, ¿por qué cambiamos a menudo lo indispensable por lo superfluo?


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MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.



***
¿Más o menos civilización?
Una cultura, un pueblo, es civilizado en proporción a cuanto ha sabido desarrollar su convivencia, su empatía, su arte, su ingeniería y su capacidad de disfrutar de la vida. Todo lo demás es secundario.

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***

Su mirada le suplicó: “Hoy quiero ser el vacío legal de todas las demás”.

Lourdes Pérez

***

Cuando creía que comprendía todo empecé a entender que no sabía nada, y fue entonces cuando comencé realmente a comprender, al menos, algo.

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***






¿Recuerdas? primero danzamos
sobre el volcán, pero ¿dónde dejamos
las flores? en el sitio en que la letra cayó
él atravesó el pasillo pasando de una puerta
a otra "finalmente he cedido, al fin he
cedido, terminé por ceder, he cedido, fue
delicioso" Ellos desaparecieron en una limosina
negra, "he caído del beso hacia la vida"
dijo ella ¡oh! no es necesario . . .

Hablar de eso no lo van a soportar, ella
se puso otra vez esa ropa que parece continuar
la piel, construyen su vida como un teatro
en campaña, es un rudo oficio
mantener en juego el mayor tiempo

posible, antes que todo no volteé y no resbalé
fuera del campo, pero es una incendiaria,
un pez que muerde las manzanas, una gallina, sí
una gallina que hace que él utilice sus propios cuchillos.
Hubo la primera flecha, que fue el más bello malentendido,
comparado con los otros, ella salió del gran movimiento
giratorio, ella se plantó y "vi los rastros de los pies
desnudos de Diana, solamente los rastros y la violenta corriente
del aire, enseguida perdí la idea misma de la posesión"

Fue la entrada en escena empujada
por un gran soplo, un espacio bello, sin nada
adentro que fuera necesario tener abierto, golpe
por golpe, quedaba sólo el juego, el choque desigual
de los dos términos y el momento de la apuesta,
pues nadie más quería volver a lo mismo.

Josée Lapeyrére, incluido en Poesía francesa actual (Biblioteca digital, República Dominicana, 2009).


domingo, 20 de enero de 2019


VOCES entre VOCES



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TEMAS TERTULIA 25-1-2019

PIRÓMANOS DE SUEÑOS
DÍGAME USTED . . .
MICRORRELATOS Y AFORISMOS

"En un mundo de plástico y ruido, quiero ser de barro y de silencio".(Eduardo Galeano)






Tengo que pedir disculpas
por entrometerme en lo que no me corresponde.

Tengo que pedir disculpas
por la disparatada idea de cantar boleros

cuando las sillas ya estaban patas pa’arriba y los garzones me habían advertido
que se estaba haciendo tarde.

Tengo que pedirte disculpas:
tú me dirás por qué.

Y a ustedes también tengo que pedirles disculpas
por haberlos dejado vivos cuando bien podría eliminarlos

y así ponerle fin
a esas deliberaciones bizantinas
por las que perdimos nuestro empleo.

A la más dramática especialmente:
tuvo que recogerme cuando los garzones

se aburrieron de patearme en la cuneta.

—No, yo no soy el Chico Figueroa —tuve que aclararle—
ni doy tanto jugo como el otro ahueonao
pero me sé de memoria las Coplas a la muerte

de su padre y puedo hablar en tres idiomas al mismo tiempo antes de llegar al quinto trago.

Estaba saliendo el sol, pero esa parte no es mi culpa
(nadie la mandó a recogerme).

Estaba saliendo el sol: pero ahí sí
que no me hago responsable.

Cristián Gómez Olivares en La nieve es nuestra (2012), incluido en Doce en punto. Poesía chilena reciente (1971-1982)  (UNAM, México, 2012, selec. de Daniel Saldaña París).
Otros poemas de Cristián Gómez Olivares y artículos sobre su obra
GARZÓN: en Chile, camarero, mesero.


    "Uno sobrevive en los demás, en la memoria y en los actos de los demás."(Eduardo Galeano)

TEXTOS TERTULIA 18-1-2019

MIRADAS
ABUELOS
MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.


MIRADAS

LO QUE VEN MIS OJOS

Mis ojos, como sabes, son ojos porque miran,
porque sólo con ellos se tornan manifiestos
los cambios, las rutinas, y queda señalado
el tiempo y el preciso desgaste de los días.
Mis ojos no se paran en la piel y en la forma,
anhelan conocer los profundos confines
de las almas que cruzan por su amplio camino
de ciento ochenta grados o más cuando usa el giro.
Mis ojos miran lejos y dentro también miran,
inquietos se deslizan usando la saliva
y de las malas babas -que a veces se avecinan-
fabrican colchonetas o se hacen una lira.
Mis ojos se detienen en las cosas sencillas
que son lo más hermoso que contiene la vida,
y se recrean, dóciles, cuando encuentran belleza
en el mar, en el cielo, en el llanto o la risa.
Mis ojos, sus recuerdos y sus melancolías
dan paso a proyecciones de futuros inciertos
y se acomodan prestos a la luz infinita
que les da la razón de ser… porque te miran.

Victoria Blanco


MIRADAS

Fue durante la presentación del libro de una amiga, hace ya unos cuantos años, en Madrid.
¿Has aprendido a llorar?” me preguntó de repente, mirándome fijamente a los ojos, aquel tipo extraño, en un bar de Lavapiés.
Me quedé pensándolo, claro, la pregunta tenía mucha miga.
Antes de que se me ocurriera la primera palabra para salir del paso, preguntó: “¿Sabes reír?”
Volví a caer en el silencio, le miré, sonreí y dijo,: Bueno, parece que vas aprendiendo . . .
No le volví a ver nunca más.
Espero que él haya apreciado mi sonrisa tanto como yo aprecié, al cabo del tiempo, sus preguntas, esas preguntas que tanto me hicieron reflexionar sobre lo que es realmente importante aprender en la vida.
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MIRADAS

Quien no conoce la angustia,
¿qué sabe de tus pasos perdidos?
Herido de sal.
Peregrino de desierto,
ya no veo de qué espejismo soy capaz.
Pero me niego a que
las palabras huelan a llanto.
Y para que no me la mude el viento,
la voz de mis deseos en mis cuerdas vocales prendo,
despacio, en silencio,
por dentro.

J.J.C. - Juan Jiménez Caballero


ABUELOS

Mi abuelo tenía callos en las manos, muchos, y ni se preguntaba porqué los tenía, daba por hecho que la vida es así.
Mi abuelo tenía sus sueños, como todos, sacar adelante a su familia y llegar a ser alguien, ese alguien que él apenas conocía, pero recordaba perfectamente en la memoria ancestral que todos tenemos, ser, al fin, tras tantos siglos de miseria, alguien.

Otro de los sueños de mi abuelo era dar estudios, al menos, a una de sus dos hijas, la cosa no daba para más, y se los dio, con mucho sacrificio, se los dio. Pero la chiquilla, bien criada, se les fue a América, ella también tenía sus sueños . . .
Y mi abuelo, añorando cada día a su hija, siguió siendo quien era: el castañero del pueblo que, para el verano, se había montado su pequeña fábrica de helados, artesanales y con la mejor leche gallega, porque las cosas, como decían en su generación, si se hacen, hay que hacerlas bien, así había de donde tirar en esos dos únicos meses en que en Galicia se pueden tomar helados, porque el campo, teniendo poca tierra, ya no daba para vivir dignamente. Aún quedan ancianas hoy en día que comieron, siendo niñas, aquellos helados y los recuerdan como los mejores sabores de su infancia.

Mi abueño se libró de la guerra porque era muy bajo, pero le tocó vivir muy de cerca la guerra, aunque ésa es otra historia.
A mi abuelo la vida le regaló luego un nieto de 1,80 y me consta que sonrió muchas veces mirándome y pensando en las bromas de la genética antes de saber qué era eso.
Mi abuelo era una buena persona, sin más, como lo es la inmensa mayoría de la humanidad.
Pero no puedo olvidar que mis abuelos son también todos esos que no conocí ni conozco, los abuelos de mis semejantes, los de todas las personas que hoy estamos vivos y que olvidamos, demasiado a menudo, que todo lo que somos se lo debemos a ellos, a su trabajo, su sudor, sus risas, sus lágrimas, a su entereza y resistencia, a su empatía, a su sabiduría y su invenvible esperanza en que un mundo mejor siempre es posible.

Cuando nacieron nuestros abuelos los derechos humanos apenas existían, a ellos les tocó lo más duro de la lucha para conquistarlos, a nosotros nos parecen hoy obvios y cotidianos pero, ¿abremos conservarlos y ampliarlos?, ¿podremos algún día anidar en la memoria de nuestros nietos con la dignidad de que está cubierto en nosotros el recuerdo de nuestros abuelos?

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ABUELOS


¿POR QUÉ?
Audio:


Rafael Cotilla


MICRORRELATOS, AFORISMOS Y OTRAS COSAS.

***

Cada noche, la princesa pasaba de puntillas junto al dragón para que el miedo la obligara a huir de allí.

Lourdes Pérez.

***
¿Por qué llamamos penas a lo que no son más que lecciones?

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***





Ustedes no saben por qué me van a matar
Pero yo sí lo sé         ustedes creen
que la fe se puede partir en dos         Ser otra
que la de ustedes         Yo sé
yo no creo         Sólo hay una
razón para matar a alguien
además de la gente sin rostro que uno siempre mata
Ustedes me matan porque me niego
a fingir que ustedes pueden entenderme
Yo no miento         Ustedes nunca podrán
sentir lo que sentí yo dentro del dragón
Con mis pies en el fondo de su aliento

Åsa Maria Kraft en Vírgenes en altísima conversación sacra (2003), incluido en Mujeres en el Norte. Trece poetas suecas  (Devenir, Madrid, 2011, selec. y trad. de René Vázquez Díaz).
Otros poemas de Åsa Maria Kraft
Durante varios días estuve anestesiada...Me caí por su garganta hasta un hueco oscuro...-Yo- Margarita...