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TEMAS
TERTULIA 17-8-2018
ROCAS
MÍRAME
A LOS OJOS
MICRORRELATOS
Cuando
tratamos de descubrir lo mejor que hay en los demás, descubrimos lo
mejor de nosotros mismos. (A.Ward)
«Princenton,
Nueva Jersey. — Esta noche falleció
en su casa el Dr. J. Robert Oppenheimer,
precursor en el desarrollo de la primera
bomba atómica norteamericana».
(De la prensa diaria)
Se aquietan tus tristes manos de sujetar la pipa,
tus asombrados huesos de hijo de inmigrantes.
Ya no hablas de cosas cada vez más terribles
con voz suave,
ni eres un hombre tímido
ni nada.
La guerra y la paz son para ti la misma cosa.
Podría decirse que has perdido
toda la energía.
Entre la vida y tú se ha levantado
un muro:
en el indivisible mundo de los muertos
ahora te desintegras para siempre.
Orlando Alomá, incluido en Nueva poesía cubana (Ediciones Península, Barcelona, 1970, ed. de José Agustín Goytisolo).
en su casa el Dr. J. Robert Oppenheimer,
precursor en el desarrollo de la primera
bomba atómica norteamericana».
(De la prensa diaria)
Se aquietan tus tristes manos de sujetar la pipa,
tus asombrados huesos de hijo de inmigrantes.
Ya no hablas de cosas cada vez más terribles
con voz suave,
ni eres un hombre tímido
ni nada.
La guerra y la paz son para ti la misma cosa.
Podría decirse que has perdido
toda la energía.
Entre la vida y tú se ha levantado
un muro:
en el indivisible mundo de los muertos
ahora te desintegras para siempre.
Orlando Alomá, incluido en Nueva poesía cubana (Ediciones Península, Barcelona, 1970, ed. de José Agustín Goytisolo).
La
felicidad es darse cuenta de que nada es demasiado importante.
(Antonio Gala)
TEXTOS
TERTULIA 10-8-2018
EL
FUTURO ES FRÁGIL
LAS
CEJAS DE FRIDA
MICRORRELATOS
EL
FUTURO ES FRÁGIL
Quebradizo
como el buen cristal. Inestable como un castillo de naipes. Delicado
como la seda Pattu.
Movedizo cual materia viscosa. Volátil como la flor de diente de
león. Efímero como un amor puro. Cada respiración le resta tiempo.
El soplo de la mañana le tambalea. Un paso en falso le
desestabiliza. La rutina desgaja su urdimbre. Un gesto brusco le pone
en peligro. Los lavados de la vida le enturbian.
Así,
pues, la habilidad radica en vivir cada día como único e
irrepetible, convertir los minutos de hoy en los bellos recuerdos de
mañana para llegar hasta él desgastados, hechos trizas, existidos,
enteramente habitados y, cuando las campanas doblen por nosotros, los
ángeles sonrían sabedores de que la inestabilidad de la meta no se
adueñó de nuestras horas pues comprendimos que el futuro sólo es
frágil si se desprecia el presente.
EL
FUTURO ES FRÁGIL
Tengo
días...
tengo
días que no.
Tengo
días que si.
Tengo
días,
que
le echo el pulso, con el dedo chico,
a
Popeye harto espinacas.
Tengo
días...
Tengo
días que si.
Tengo
días que no.
Tengo
días en los que me roe las entrañas,
hasta
el dulce ratoncito Pérez.
Tengo
días...
¡¡
Búscame!! , lo mismo
el
día de hoy tienes suerte.
JJC
– Juan Jiménez Caballero
EL
FUTURO ES FRÁGIL
"Nada
añoro más que aquellos dulces tiempos en que no tenía nada que
añorar".
(Nekovidal)
“Un
pequeño descuido de mamá o papá, te sientes abandonado durante tan
sólo unos minutos mientras eres una indefensa criatura de meses, y
te verás condenado, sin sospecharlo siquiera, durante el resto de tu
vida a buscar un tipo de cobijo, amistad o amor que no puedes
identificar al desconocer el origen de tu carencia, el origen de tu
dolor o tu frustración.
Ese
suceso fortuito marcará el resto de tu vida o la de tus hijos. Es
la aparente crueldad del azar sobre las especies primitivas.
Saber
prevenir y evitar ese tipo de dolores en la infancia es a lo que
deberíamos llamar civilización”. (Nekovidal)
Estoy
convencido de que no somos conscientes de la importancia de la
infancia en nuestras vidas ni de la educación en la construcción de
las relaciones sociales. Estudiamos en psicología que los primeros
cuatro años de nuestra vida condicionan completamente el resto de
nuestra existencia hasta el punto de que algunas heridas y costumbres
producidas y captadas entonces nos acompañan hasta el final de
nuestros días. Por ser algunas de ellas traumáticas y dolorosas la
naturaleza, siempre tan sabia, las borra de nuestra primera memoria,
precisamente la de esos cuatro primeros años.
Siempre
me ha sorprendido que exijamos una serie de estudios y exámenes para
permitir conducir o manejar ciertas máquinas pero no para ser
padres, ni siquiera los conocimientos más básicos. Se sobreentiende
que el derecho a tener hijos y criarlos como creamos conveniente es
un derecho básico de todo ser humano, y sin duda lo es, pero no
debería chocar ese derecho con una instrucción mínima en ese
sentido, todos, padres e hijos, nos beneficiaríamos de ello. No me
refiero, evidentemente a imponer una educación bajo tal o cual
religión o ideología política, sino a informar a los padres del
daño que pueden hacer a sus hijos por mero desconocimiento a fin de
que puedan evitarlo. Sirva de ejemplo uno de los tantos
descubrimientos de la neurología en los últimos tiempos, que
durante el primer año de vida aún no están estructuradas
sólidamente algunas conexiones entre diferentes partes del cerebro,
por ello zarandear violentamente a un bebé durante esta etapa, algo
que hacen, generalmente sin ninguna mala intención, sólo por
agotamiento o sueño, algunas madres al no poder identificar la razón
del llanto de su bebé, da lugar a la ruptura de algunas de esas
conexiones, lo que conllevará que esa persona sea en su etapa adulta
mucho menos empática e insensible al dolor ajeno, llegando a tener
comportamientos psicópáticos, que no redundarán siempre, como
suele creerse, en un asesino, pero sí en una persona a la que se le
ha amputado parte de su capacidad para ser feliz, al margen del daño
que provoque en su entorno familiar y social. Hoy en día sabemos
también que la alimentación de la madre gestante condiciona mucho
más de lo que pensábamos la futura vida de su hijo, hasta el punto
de que se compara su influencia con el bagaje genético y está
demostrado sin ninguna duda que una mujer embarazada que decida hacer
dieta dará a luz un ser humano con tendencia clara al sobrepeso y a
la obesidad.
Otro
ejemplo sería la conflictiva etapa de la adolescencia, alargada en
las últimas generaciones artificialmente por motivos puramente
comerciales. Durante esta etapa nuestro cerebro sufre una
transformación profunda, una más, la última, antes de
transformarse definitivamente en un cerebro adulto. Estos cambios
incluyen una pésima percepción del peligro, como si la naturaleza
nos obligara al riesgo, posiblemente con el fin de proveernos de un
aprendizaje que nos será necesario en el futuro para poder medir
mejor los peligros y las consecuencias de nuestros actos.
Son
sólo dos ejemplos, hay muchos más, como la nefasta ausencia de los
padres durante los primeros años, forzando a los niños a convivir
con otros cuando aún no ha dado comienzo su etapa social,
generalmente a partir de los cinco años, ausencia que, por suerte,
se compensa en muchas familias con la presencia de los abuelos.
Creo
que debería de entregarse a los padres un texto básico señalando
este tipo de cosas para evitar que cometieran errores que casi
siempre suceden por desconociento, no por mala fe o
irresponsabilidad. Desde un punto de vista tanto personal como
social, sería de gran ayuda para todos.
Nos
encontramos luego con la otra cara de la moneda, la enseñanza en el
entorno social. Sorprende que aún sigamos utilizando, en la mayoría
del mundo, un sistema educativo creado en Prusia hace dos siglos y
medio con la única intención de formar buenos trabajadores para las
primeras fábricas, sin el menor cuidado de la creatividad,
curiosidad intelectual o felicidad del ser humano al que se pretendía
instruir. En aquella época ni se pensaba siquiera en el aspecto
humanista y enriquecedor que debe brindar todo buen sistema de
enseñanza, haciendo del hecho de aprender y de la curiosidad un
placer en vez de una desagradable obligación, tan sólo el más
estricto pragmatismo guiaba aquel sistema educativo.
En
los dos últimos siglos se han probado varios métodos alternativos,
como Summerhill, Montesori o la Escuela Libre de Enseñanza, por
citar sólo algunos, y todos ellos han demostrado ser mucho más
eficaces pero, sorprendentemente, ningún gobierno los ha hecho
oficiales ni ha asumido lo mejor, aunque sólo fuera en parte, de
cada uno de ellos. La razón parece obvia: al tener los gobernantes
un tiempo funcional de cuatro años, ninguno se atreve a dar el gran
salto en educación a sabiendas de que, como cualquier idea nueva,
por muy demostrada que esté su eficacia, va a recibir el rechazo por
temor de una parte de la población. Por otro lado, a ningún
político le va a interesar crear generaciones de personas bien
formadas con curiosidad, creatividad y capacidad de crítica, serían
los mejores ciudadanos, sin duda, pero también los más difíciles
de manipular . . .
Personalmente
creo que el sistema educativo de una sociedad, junto con los
presupuestos generales del estado y las declaraciones de guerra,
deberían ser siempre consultados a todos los ciudadanos, tras un
período de campañas informativas sobre las diferentes opciones,
sólo así se daría ese paso adelante, porque como dijo en una
ocasión Charles De Gaulle: “He
llegado a la conclusión de que la política es demasiado seria para
dejarla en manos de los políticos”.
Es
difícil discernir cual de estos dos errores masivos y cotidianos
hacen más daño al conjunto de las sociedades humanas, si la
carencia por parte de los padres de unos conocimientos básicos sobre
los mecanismos psicológicos que se producen en sus hijos durante la
infancia y adolescencia o el mantenimiento de sistemas educativos
obsoletos, ineficientes y alienantes.
De
lo que no cabe la menor duda es de que mientras no se construyan esas
dos bases de una forma sólida seguiremos criando y creando personas
menos felices, productivas y humanas, al tiempo que más tristes,
frustradas y agresivas y condenándonos a todos a un futuro tan
triste como la vida que hoy día se da a la mayoría de los niños en
el mundo, porque son ellos, indiscutiblemente, el futuro.
Nekovidal -
nekovidal@gmail.com
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LIBRES www.arteslibres.net
EL
FUTURO ES FRÁGIL
NOSTALGIA
Audio:
Rafael
Cotilla
LAS
CEJAS DE FRIDA
Esas
cejas contra las que se estrellaron tantos elementos que pretendiendo
ser muy machos les faltó tiempo para ser más hombres.
Las
mismas cejas que supieron hermanar la ética y la estética sobre una
mirada lúcida.
Las
cejas de una eterna estudiante del dolor.
Las
cejas de una mujer demasiado grande ahogándose en un mundo demasiado
pequeño.
Las
cejas de Frida . . .
LAS
CEJAS DE FRIDA
Horizonte
boscoso de la idea
tan
frondoso como miradas que protege
Bajo
su sombra descubrió Frida los colores
que
llenaron su soledad de forma y flores.
Cejas
pobladas que enigmatizan y dan magia
Sobre
ellas germinaron los jardines
en
los que sucumbieron los amores
y
los frutos de vida sin destino.
Cejas
de Frida, universo altivo,
que
definen su mundo y su hermosura.
Haydee
Acosta
MICRORRELATOS
Le
dijo la lágrima a la gota de lluvia. “Nadie imagina cuanto dolor
llevo en mi”.
“A
mi me ocurre lo mismo”, contestó la gota de lluvia, “nadie
imagina cuanto tiempo llevo en mí”.
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nekovidal@gmail.com
ARTES LIBRES
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MICRORRELATOS
No
desesperes amor,
que
hasta las cebollas
se
secan de llantos
por
aguardar mi
procedencia.
José
María Rico
MICRORRELATOS
Me
gustas y me da igual lo que haya pasado hasta ahora. Que me quedes tú
y que seas de Verdad. Aquella noche lloré tanto que hilé la
eternidad con lágrimas de sal.
Lourdes
Pérez
"Y
he aquí una doctrina de la que vas a reírte: el amor, Govinda, me
parece la cosa más importante que existe. Analizar el mundo,
explicarlo o despreciarlo acaso sea la tarea principal de los grandes
filósofos. Yo en cambio lo único que persigo es poder amar al
mundo, no despreciarlo, no odiarlo a él ni odiarme a mí mismo,
poder contemplarlo -y con él a mí mismo y a todos los seres- con
amor, admiración y respeto..."
(Siddharta
Hermann Hesse)
Pasa,
No te detenga el miedo
O la conmoción,
Y evita ese aire tuyo de desgracia:
Aquí en el suelo
En lo más profundo,
No hay secreto...
Pero si pones bien tu oído sobre la tierra,
Oíras latir un corazón
Al ritmo pulsante del mundo...
Antonio Cardoso, incluido en Poesía negra (Biblioteca virtual, Internet, s. a., versión de Carlos Osorio).
No te detenga el miedo
O la conmoción,
Y evita ese aire tuyo de desgracia:
Aquí en el suelo
En lo más profundo,
No hay secreto...
Pero si pones bien tu oído sobre la tierra,
Oíras latir un corazón
Al ritmo pulsante del mundo...
Antonio Cardoso, incluido en Poesía negra (Biblioteca virtual, Internet, s. a., versión de Carlos Osorio).
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